La reaparición de la cuña marina en los últimos kilómetros del Río Magdalena es objeto de vigilancia de parte de personal de la Triple A.

Sobre el tema, el gerente de la empresa de servicio, Ramón Hemer, estimó que “el efecto para los usuarios de Puerto Colombia y Salgar dependerá de lo fuerte de la sequía”.

Explicó que mientras tanto, se está “trabajando a corto plazo con tareas de mitigación”, pero aclaró que “el agua es potable”.

Se determinó mientras tanto como contingencia para mejorar la calidad del agua que llega a los hogares de los porteños, “mezclar el agua del acueducto de Barranquilla con el acueducto de Las Flores, disminuir un poco el caudal que captamos y de esta forma mitigar un poco el efecto”.

La cuña marina, fenómeno natural originado por la sequía, se presenta “por el descenso del nivel del Río Magdalena”.

“El mar “gana terreno” y se mezcla con el agua del Río Magdalena”, explicó Hemer. 

En el caso del agua que se consume en Puerto Colombia y Salgar “por tener la  bocatoma de Las Flores muy cercana, varía la calidad del agua que se capta.”

La Triple A identificó recientemente el inicio del fenómeno natural de la cuña marina en el agua por la disminución del caudal consecuencia de la sequía que vive el país.

Por la distancia de la desembocadura, al acueducto de Barranquilla no alcanza a llegar el efecto de la cuña marina.